Programadores: los sueldos en dólares aceleran la migración virtual
La pandemia aceleró los cambios laborales y obligó a que las empresas, sea cual sea su actividad, deban estar presentes en internet. Esto disparó la demanda de programadores y personal capacitado en el uso de las nuevas tecnologías.
Los estudiantes de las carrera de programación de Digital Bluee, a partir de su graduación reciben ofertas laborales todos los días y no solo de empresas argentinas, sino de todo el mundo. Tanto para Estados Unidos como para Europa, Argentina es uno de los países proveedores de mano de obra calificada y barata. En este marco, los chicos no dudan en trabajar para el exterior y cobrar en moneda extranjera, sin moverse de su casa. Lo que se dice, nómades digitales. Esto supone un importante desafío para las compañías locales que deben competir con salarios del exterior.
Claramente el Covid cambió para siempre la forma de trabajar. Hoy es posible realizar una actividad para una empresa de Estados Unidos o Europa desde un sillón de la casa. Las barreras geográficas no existen en un mundo global enlazado por la tecnología, que de manera cada vez más rápida, conecta a los seres humanos sin importar a cuántos kilómetros se encuentren físicamente.
Según los especialistas en reclutamiento y gestión del talento de Randstad Professionals, las posiciones con mayor demanda laboral en Argentina son los profesionales de Data Science y Business Intelligence, especialistas en Marketing Digital, diseñadores Web y Mobile, diseñadores de Experiencia de Usuario (UX), desarrolladores Full Stack, especialistas en redes, expertos en Seguridad de la Información, responsables de Infraestructura, analistas de Soporte y especialistas en eCommerce.
“Las organizaciones tienen gran dificultad para cubrir posiciones y retener a los talentos porque los jóvenes están tentados constantemente por salarios y beneficios superadores que, en muchos casos, vienen del exterior, de empresas que les ofrecen sueldos en moneda dura para trabajar desde Argentina para compañías extranjeras”, explicaron desde Randstad.
“A partir del home office que impulsó la pandemia, se agudizo la competencia por el talento IT, que por su gran demanda y escasez a nivel mundial se ve tentado por ofertas del exterior, con remuneraciones y beneficios muy difíciles de igualar por empresas locales”, señaló Andrea Avila, CEO de Randstad para Argentina y Uruguay.
Es importante agregar que la gran demanda también se da no solo por las empresas de software, sino por la pandemia. Las organizaciones que no tenían nada que ver con el software, como por ejemplo un banco o una compañía de seguros, tuvieron que convertirse en empresas de tecnología y requieren de profesionales que tengan estos conocimientos. La demanda es grande tanto en cantidad de profesionales como en diversidad. Se requieren programadores y personas que sepan construir una app por ejemplo.